Comprá por Mercado Pago DIEGO LUGANO, DE CORAZÓN CELESTE
De las ventanas de los edificios, al igual que de la mayoría de las casas, colgaban banderas patrias. Algunas flameaban movidas por el viento fuerte que soplaba en ese mediodía de julio, otras eran agitadas por manos nerviosas que se sumaban al saludo. Niños en hombros de padres que, como pudieron, les habían explicado cuál era la razón por la que tanta gente saltaba y cantaba. Grandes que parecían niños, gritando y llorando de la emoción y confirmando que el llanto y la alegría a veces van juntos en esta vida.
Dentro del ómnibus que los llevaba, y con una carga de emotividad enorme, los jugadores sentían como que el piso se les movía al ver esos rostros de gente adulta conmovida y con lágrimas en sus ojos.
Visiblemente emocionado, Diego se agarraba la cabeza y no lo podía creer. Aquella era la demostración de un pueblo que había encontrado la motivación para expresar su genuina alegría después de tantos años de frustraciones y amarguras. Y aquel grupo de muchachos, que vestidos de Celeste revivieron glorias y rescataron tradiciones, eran la causa de ese sentimiento que desbordaba.
Un gran grupo. Un gran equipo. Y un gran Capitán, que hizo recordar con orgullo a los grandes Capitanes de nuestra historia y que, aquel día, también él lloró como un uruguayo más.
Prólogo del maestro Óscar Washington Tabárez
""allí estaba el líder, que como capitán representaba el sentimiento grupal y lo transmitía a otros integrantes del grupo para que existiese una convicción común, que mostraba su compromiso con la historia de nuestro fútbol y con la gente de este país y su fe para encarar y superar los desafíos. Y, como siempre, con transparencia, con lealtad, con espíritu ganador""
Oscar Washington Tabárez
CATEGORÍAS: EDUCATIVOS - DEPORTES - URUGUAY - 1ª EDICIÓN
EDITORIAL: PLANETA
AÑO: 2011
